Como un mod y como un brigadista internacional

Paseaba Txitxo por Portobello road, en Londres, absorto en sus sueños y sus pensamientos hasta que una señal le volvió al presente. La consciencia suele volver con cosas realmente importantes, un billete en el suelo, la chica de la que te puedes enamorar, almenos 10 segundos, o un ciclista. Txitxo primero se fijó en la bicicleta, luego en el ciclista y por último en su maillot. Cuando ves un ciclista amater (y no amater) , siempre te produce una sensación de estar viendo uno de los tuyos. Uno del barrio, de tu clan ideológico, de tu familia. El ciclista es un tipo con el que compartirías el pan en una trinchera. En definitiva, el ciclista es un camarada, aunque no hayas ido en bici desde los 12 años, con tu última BH cross, el verano del 90. Más entreñable le pareció a Txitxo aquel ciclista por que tenía más de 60 años y llevaba una bicicleta de los 80.

Txitxo sonreía y miraba al ciclista para que éste le descubriera su dedo al aire en señal de “great”, aunque llevara las manos en los bolsillos de la gabardina. Hay gestos que no hace falta gesticularlos, se llevan en la mirada. Pero justo en ese momento Txitxo descubrió el maillot. Un maillot con motivos republicanos, de la segunda república española se entiende, y un “NO PASARAN” en el centro del mismo. La camadería se trasnformó en admiración y Txtixo lo persiguió para preguntarle por el maillot. Justo en ese momento pasó un bus londinense y la conversación quedó reservada a los dos hombres, uno delante del otro, disfrutando de aquel encuentro. Algunas frases sí que se oyeron, y quedaron para siempre.

-      - Los hacemos nosotros, nunca para venderlos. Siempre con temas que representan la lucha contra el fascismo. Sobretodo el de ahora, el neofascismo.

Silencio…

-      - Pues vaya si pasaron…

-      - Pasaron y aun están…

Se despidieron con admiración mutua, de agradecimiento por esa conversación que no podía estar prevista de ninguna de las maneras en ninguna de las agendas.

Uno llegará a casa y se lo explicará a su mujer mientras ésta lee el Daily Mail y hace como que le escucha.

Txitxo me lo explicó a mi. Y yo dejo constancia como un notario. Porque hay encuentros que deben estar escritos.